Uno que no deja de sorprenderse con este país nuestro
Supongo que, como yo, muchos de vosotros habréis realizado en su momento la oportuna rectificación de datos ante las financieras piratas, a la que siempre dan oportuna y cumplida respuesta. Supongo también que, al igual que yo, estarías hartos de llamadas (en mi caso creo que van más de 1000) a vuestro móvil y a vuestro fijo e incluso, es más que probable, a familiares, vecinos y centro de trabajo. Es casi seguro también que, como hice yo, compraseis un móvil prepago baratito para tener, al menos, un poco de tranquilidad de ánimo y facilitaseis este nuevo número a las sanguijuelas.
La segunda parte ya la sabéis también casi seguro: siguen llamando hasta al yerno del vecino del 3º A. La rectificación se la pasan por el forro de los c..... Así que, harto de un país donde los oligopolios hacen lo que les dé la gana y las personas parecemos ser antes siervos de la gleba que ciudadanos, realicé las oportunas denuncias ante la Agencia Española de Protección de Datos. He de aclararos que denuncié tanto a las financieras como a las empresas de recobros.
Las decepcionantes resoluciones de la AEPD me han ido llegando recientemente, todas ellas desestimando mi solicitud de actuaciones inspectoras y, en su caso, de procedimientos sancionadores. La argumentación no deja, a mi juicio, de ser curiosa. Os la resumo:
- Las sanguijuelas de Cetelem y CitiBank pueden seguir usando el teléfono rectificado (art. 16.5 LOPD y 33.1 del Reglamento de la LOPD).
- No se ha probado que Team 4 me reclame el pago de una deuda en nombre de Uno-e. El principio de presunción de inocencia impide imputar una infracción administrativa.
- Aunque, flagrante contradicción, no ha habido cesión irregular de datos si el acceso de Team 4 es para realizar un servicio a Uno-e (art. 12.1 LOPD).
- Además, este servicio es para asegurar el cumplimiento de un contrato (Sentencias de la Audiencia Nacional de 14 de mayo de 2009 y 21 de enero y 22 de julio de 2010). Estas dos últimas sentencias abren la vía a que los filibusteros puedan obtener información personal sobre nosotros desde fuentes públicas, detectives privados o por medio de la petición de información a familiares del deudor (qué barbaridad). Una Sentencia de la Audiencia Nacional (de 14 de marzo de 2013), a favor de nuestros amigos de Cofidis, les da patente de corso para hacer lo que les venga en gana. Os aconsejo que la veáis porque da miedo.
Ahora decidme: ¿no os gustaría ser ciudadanos?
"Nadie será objeto de injerencias arbitrarias en su vida privada, su familia, su domicilio o su correspondencia, ni de ataques a su honra o a su reputación. Toda persona tiene derecho a la protección de la ley contra tales injerencias o ataques".
DECLARACIÓN UNIVERSAL DE DERECHOS HUMANOS, art. 12