El asunto es que muchos seguros cubren la incapacidad, ya sea total o absoluta. Y, claro, si tienes reconocido un grado de discapacidad tienes, a priori, mas papeletas para pedir conseguir dicha incapacidad que una persona que está teóricamente muy sana. Al día de hoy la probabilidad de que te concedan una incapacidad en este país, a menos que estés agonizante, es bastante baja, pero ahí está. De modo que para los seguros es un riesgo que no desean asumir.